Hace 15 meses desde la última entrada que escribí en el blog y hoy, a 1 de Agosto de 2011, hago una nueva entrada, que llevaba tiempo queriendo escribir, con nuevos datos obtenidos a través de la experiencia que he ido adquiriendo realizando la sanación reconectiva, junto con mi propia expansión de la conciencia en el curso de todo este tiempo transcurrido.
Tal como titulo esta entrada, una de las cosas más gratas, que puedo afirmar, después de todo el tiempo transcurrido practicando la sanación, es que NO HAY NECESIDAD DE KARMA NI DE PROCESAMIENTO.
Intentaré explicar esta afirmación.
Estas frecuencias reconectadoras, proceden de la 5ª dimensión y de otras superiores.
Brevemente aclaro que las dimensiones superiores son más ligeras, las partículas se mueven a vibraciones altísimas y en las dimensiones inferiores, la vibración es más lenta y las partículas se juntan formando la materia densa.
A partir de la 5ª dimensión, ya no existe la dualidad. Por tanto el tiempo y el espacio, tal como lo conocemos, deja de existir. Sólo reina un ETERNO AHORA.
La dualidad es propia de la 3ª y la 4ª dimensiones. En estas dimensiones, sí se considera el Karma, o lo que es lo mismo LA LEY DE ACCIÓN-REACCIÓN. Siguen un patrón basado en la polaridad: día-noche, femenino-masculino, bien-mal, luz-oscuridad…etc.
Así que he constatado por experiencia, que en esta sanación la ley que entra en funcionamiento es LA LEY DE LA GRACIA.
Es decir, no se trata de negar la Ley de Acción-Reacción, de la 3ª y 4ª dimensiones, que tienen una determinada frecuencia vibratoria, sino que las frecuencias sanadoras, al ser de una (o unas) dimensión superior, y por tanto de vibración más alta, al superponerse sobre las otras frecuencias inferiores de 3ª y 4ª dimensiones, simplemente las NEUTRALIZAN.
He sido testigo de ello en todos los casos. Unas veces con resultados más visibles y externos, y otras de manera más interna y sutil.
Unas veces con disminución, o incluso desaparición de quistes o manchas sospechosas en diversas zonas del cuerpo, y en otras ocasiones con cambios de la persona hacia un verdadero renacer interior, lleno de alegría y esperanza. Recordando la Verdad de Quienes Son y recomponiendo su vida bajo el Nuevo Paradigma reencontrado.
Estas frecuencias son TAN TREMENDAMENTE AMOROSAS, que lo único que les interesa es quitar sufrimiento almacenado en la memoria celular del cuerpo del paciente. Y que se manifiesta externamente, en enfermedad física, mental o emocional.
No tienen en cuenta, ni juzgan lo que haya hecho la persona o haya dejado de hacer…eso es cosa de la dimensiones inferiores. Estas frecuencias son tan A MOROSAS, que diluyen literalmente los bloqueos que interfieren en el flujo perfecto con su SER. La RECONECTAN a su Patrón Perfecto.
Actúan de tal manera, que dan como resultado, los llamados MILAGROS.
¿Y qué son los MILAGROS? Son recursos de aprendizaje que no siguen las leyes que se conocen en espacio tiempo de la dimensión tangible. Así, en vez de que esa persona tenga que seguir la inercia y la dinámica de la “rueda del Karma”, los Milagros ACORTAN EL TIEMPO, y ya no es necesario que la persona tenga que dilatar el sufrimiento. Lo que antes le hubiese costado varias vidas en solucionar, ahora queda NEUTRALIZADO POR LA LEY DE LA GRACIA, en un momento.
La LEY DE LA GRACIA, NEUTRALIZA, DESHACE, LITERALMENTE, EL PASADO, almacenado y coagulado, en la memoria celular de la persona, en el ADN de las células de su carne, de sus huesos, de todos sus tejidos.
Lo único que entra en funcionamiento es EL AMOR INCONDICIONAL DE LA DIMENSIÓN CRÍSTICA o 5ª Dimensión. Dimensión no dual.
La persona, es BAÑADA durante la sanación con dichas frecuencias y su ADN celular, recibe la información de un nuevo PATRÓN DE LUZ SUPERIOR. El Patrón de Perfección Original. Y bajo esta nueva codificación recibida, el ADN se irá replicando en la formación de nuevas células, siguiendo la información del NUEVO MODELO SUPERIOR, recibido en la sanación.
Esto puede parecer muy técnico, pero es una manera de explicar lo que sucede.
Es por ello que cada vez que la persona está BAÑADA por estar frecuencias superiores, su “pasado” celular, va deshaciéndose. Es como quitarle “capas” de densidad almacenada, causantes de un sinfín de molestias y trastornos; y cambiarla por nueva Información-Luz.
Mucha gente me ha contado que durante la sesión, se ha visto, fugazmente, como en una especie de túnel oscuro, o espacio vacío. Muchas lo describen como que no había nada, ni se escuchaba nada, en total silencio, como si se parara hasta la respiración. Esto es muy significativo, porque justamente esta sanación es multidimensional, y para pasar de unas dimensiones a otras, se hace a través de los llamados “agujeros de gusano”.
Algunas personas, tras esos fugaces “túneles”, eran impactadas internamente, con una radiante e intensa LUZ. Según me describían luego.
Estos “agujeros de gusano” son “portales” que conectan unas dimensiones con otras. Nos conectan con EL VACÍO ABSOLUTO, EL INFINITO DESCONOCIDO, EN DONDE SE ENCUENTRAN TODOS LOS POTENCIALES DE SANACIÓN: LA FUENTE, DIOS PADRE-MADRE, para la que no tenemos conceptos.
Y así, con esta RECONEXIÓN, lo que podía haber sido un “futuro probable” de ignorancia y sufrimiento, se ha convertido en “otro futuro probable” de LUZ y sanación. Se ha acortado el tiempo. Ha sucedido un Milagro.
La Tierra actualmente se encuentra atravesando la 4ª dimensión en un Proceso de Ascensión hacia la 5ª dimensión, que concluirá en el 2012.
Estas frecuencias sanadoras, vienen a dar testimonio en estos tiempos cruciales, de lo tremendamente AMOROSA QUE ES LA 5ª DIMENSIÓN hacia la que está Ascendiendo el Planeta.
Frecuencias que están a disposición de todos los seres humanos, sin exclusión.
La única exclusión es cuando las personas las rechazan o simplemente, no saben que existen.
Sin embargo la LEY DE LA GRACIA ESTÁ PARA TODOS. Sólo hay que elegirla.
Y vuelve a ocurrir como en la Teoría Cuántica: si el observador no tiene ese “enfoque”…simplemente no puede acceder a ese potencial. Sencillamente porque para él no existe, por lo tanto no es una opción que pueda elegir…
Portamos en nuestro ADN las frecuencias de Luz (LA CONCIENCIA) que somos capaces de sostener, de encarnar, y por tanto las mismas que podemos transmitir a otras personas. Por tanto revisemos constantemente nuestro sistema de creencias.
Y en la Física Cuántica lo que prima es la máxima: CREER PARA VER…no “ver para creer”.
“CREAMOS LO QUE CREEMOS”.
Y de ahí también la máxima: HEMOS VENIDO PARA HACER CONOCIDO LO DESCONOCIDO.
María del Carmen Ortega Molina
