EL PAPEL IMPORTANTE DE LA ENERGÍA KUNDALINI DURANTE LAS SANACIONES

LA ENERGÍA KUNDALINI es un gran paquete de energía que está reservado para la evolución humana y que usualmente se le representa como una serpiente enroscada en la base de la columna.
Al Kundalini se le llama generalmente, la serpiente o el dragón durmiente, y el trayecto que realiza desde la base de la columna hasta la coronilla, se llama el camino de la iluminación.
Durante este ascenso, ioniza el fluido cerebroespinal, cambiando su estructura molecular y reorganizando el ADN, a través del nuevo campo magnético que va creando.


En esta nueva entrada en el blog, quiero hablar a grandes rasgos sobre la energía Kundalini y el papel importante que tiene en la ejecución de las sanaciones.

Después de muchos años de saber que esta energía existía, de experimentarla en carne propia y, desde que estoy realizando las sanaciones, de observar y constatar de manera experimental, cómo juega una parte imprescindible en ellas. He pensado que sería interesante hacer una pequeña reseña de toda esta constatación personal.

La primera vez que yo supe de la existencia de la energía Kundalini, fue en el año 1997 tras haber tenido una experiencia “cumbre” en la que “ella” apareció y que supuso para mí, un antes y un después en mi vida.

En aquella experiencia pude SENTIR EL CIELO EN LA TIERRA. Supe que el CIELO, era un estado de conciencia, de UNIFICACIÓN…de EXPANSIÓN.

No había que irse a ningún lado, ni buscarlo fuera de uno, irse para la “otra vida” para estar en él…el Cielo estaba en donde uno se encuentra…dentro de él.
Esta experiencia concreta, fue lo que se conoce como LA GRAN INICIACIÓN, o en términos cristianos la iniciación del Bautismo.

No se trata de ningún tipo de rito externo, sino de algo real, auténtico a nivel físico y espiritual, que ocurre dentro de las personas y que ellas lo saben cuando les sucede.

Tras tener esa experiencia “cumbre”, ya no vuelven a ser iguales y supone un Amanecer en la vida.

Antes de este Amanecer, tuve que pasar mi NOCHE OSCURA DEL ALMA.
Describí y colgué esta experiencia en las direcciones:

http://despertarkundalini.blogspot.com/

http://www.youtube.com/user/desdeelfuturo

Consideré que podría servir para algo a otras personas que pasasen por lo mismo, y el tiempo me confirmó esto último, pues han sido muchas las personas que me han escrito a lo largo del tiempo identificándose con lo que relato.

Bien, pues volviendo a LA GRAN INICIACIÓN, éste importante acontecimiento, acaece a las personas, cuando éstas, están preparadas para ello (nivel microcosmos).

Actualmente hay muchas personas que ya están preparadas para este suceso interno importante. Recordemos que el Planeta está en proceso de Ascensión y que el 2012 supone LA GRAN INICIACIÓN para la misma Tierra. Esto a nivel macrocosmos.

En ese momento su energía kundalini asciende a lo largo de su columna vertebral y sale por la coronilla, dejando reconectadas las dos glándulas cerebrales, la pineal (femenina, tierra) y la pituitaria (masculina, cielo).

Las 12 hebras del ADN, quedan reconectadas y a partir de aquí, la persona cuenta con la LUZ DE SU SER (iluminación) para activarlas, con el poder de su intención y el enfoque de su Luz.

La persona ha quedado reconectada por primera vez con el Punto Cero o Infinito.
Y por primera vez han quedado unificados su razón y su corazón. Sus hemisferios cerebrales, izquierdo (lógico) y derecho (intuitivo), quedan reunidos en un NACIMIENTO INTERNO que ilumina a la persona, y que ya no volverá a ser la misma. Se convierte en un puente de Luz entre el cielo y la tierra.

Ahora, centrándome en las sanaciones, apuntaré brevemente cómo interviene la energía Kundalini en ellas.

Durante la sanación el paciente entra en contacto con el campo del sanador.

Recordemos que en las sanaciones entran en juego la Trinidad Catalizadora de sanación, formada por el espacio unificado que ofrece el sanador (con su campo electromagnético unificado, que es irradiado por su ADN), la persona que viene a recibir la sanación, aceptando las energías y la “Sopa Primordial” o FUENTE (en dónde se encuentran todos los potenciales o frecuencias, que posibilitan los milagros) que es la que suma todo este “cóctel” de energías e intenciones, para que se dé finalmente la SANACIÓN.

Durante la sesión, el campo unificado del sanador, su presencia en el Ahora, induce al campo electromagnético del paciente a encontrar su punto de equilibrio, punto de quietud o Punto CERO. Y es entonces cuando la energía Kundalini del paciente se pone en marcha y va ascendiendo a través de su sistema energético.

La Kundalini comienza a transmutar, deshacer, literalmente, la densidad acumulada en la memoria celular del paciente, por creencias, energías y traumas no liberados.

Recordemos que crea un campo magnético nuevo, bajo el cual, cambia el giro nucleónico de los átomos de nuestro cuerpo y reorganiza todo el ADN.
Por ello se producen las sanaciones. Las sanaciones nunca son iguales, entre otras cosas, porque lo que ya se queda reorganizado en la persona, permanece así para siempre.

Así comienzan a sanarse las primeras capas, los primeros bloqueos que impedían el flujo natural y conexión con la Fuente.

La Kundalini es la energía vertical, ascendente, que nos reconecta con otras partes o aspectos nuestros, multidimensionales, en dónde esa persona no tiene ese problema y ya está sana.

Por eso se llama también una sanación cuántica, porque no sigue la linealidad horizontal de la vieja lógica, la dualidad, la polaridad, a que estamos acostumbrados en esta tercera y cuarta dimensión.

La Kundalini es una energía que sólo puede ascender cuando se encuentra en el Punto Cero: AHORA.

Tomemos como ejemplo el punto central, cero, de una escala de polaridad, en cuyos extremos están el polo (+) y el polo (-).

Es por ello que se llama la energía Virgen, la energía Pura, la energía Madre que procede de la materia, porque es una energía NEUTRA, que integra los opuestos, UNIFICA los polos, dando como resultado la sanación y en el mejor de los casos la ILUMINACIÓN o CORONACIÓN.

Coronación que a su vez, posibilita el acceso a otras dimensiones superiores.
La Kundalini sólo puede ascender en el AHORA, en el PRESENTE, por ello reconecta con los espacios intemporales en dónde no existe el tiempo tal y como lo conocemos en la tercera dimensión.

Durante los tres años y medio que llevo haciendo las sanaciones, he sido testigo de cómo esta energía actuaba en las personas de diversas y singulares maneras, según cada una de ellas necesitase.

Puedo afirmar que la Kundalini es la “llave” que porta las frecuencias para abrir las “puertas dimensionales” hacia todos los potenciales de sanación y por supuesto hacia la propia Divinidad.
Esto me recuerda al cuento de “Aladino y la lámpara maravillosa”, no es casualidad que se supiese de ella en todos los tiempos y que nos la transmitieran de formas metafóricas o simbólicas.

Antes, sólo unos poquitos estaban preparados para saber esto, ahora ha llegado el tiempo en que todo este conocimiento está al alcance de todos y de una manera muy natural.

Además corroborado todo por la ciencia y la física cuántica.

Y ya para terminar esta entrada, sólo repuntar unas curiosidades sobre esta energía.

El Caduceo es el símbolo de la salud. El asta se parece a la columna vertebral; la esfera de la parte superior representa el cerebro. Hay dos serpientes enroscadas que se complementan entre sí y miran hacia la esfera. Y unas alitas que hay antes de la esfera (cerebro) que representan LA LIBERTAD.

Este símbolo de las alas, es sumamente significativo para mí, porque lo estoy viendo en los movimientos de las manos y brazos, que realizan muchas personas durante las sanaciones.

También estas alas están en la diosa Isis de la mitología egipcia. La serpiente alada de Luz.
Y una vez expuesto todo esto, déjate llevar por la expansión y déjate fluir en la energía o la experiencia PRESENTE.

Es conveniente que arraigues en las células de tu cuerpo la nueva energía que ha entrado. Esa energía es un aspecto nuevo del propio Yo Luminoso.
Cada sanación supone una aceleración en el despertar, o lo que es lo mismo, una nueva realineación con el YO DIVINO.

M.Carmen Ortega